es la que se ha
sembrado en el hielo.
La hierba quemada
por las inclemencias
sigue siendo muy
generosa,
incluso cuando la
ruina está descontada
es capaz de morir
durante el parto
de los frutos que
nos mantienen vivos.
Poemas y relatos publicados semanalmente. Puedes ponerte en contacto conmigo escribiendo a mighergar@gmail.com